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El sector del fitness se encuentra en su mejor momento. Basta con dar un paseo por las ciudades de nuestro país para ver cómo mucha gente realizad distintos tipos de actividad física, como yoga, crossfit, footing, zumba, pilates o ir al gimnasio. Los centros deportivos han dejado de ser territorio exclusivo de los amantes de las pesas.

La cuestión es que la oferta deportiva es cada vez más amplia y variada. Desde grandes instalaciones deportivas a pequeños estudios de entrenamiento personal, pasando por clubes deportivos, gimnasios low cost, gimnasios de barrio y gym boutiques.

En este contexto de creciente interés por el deporte, el entrenamiento personal es una de las tendencias que más se ha popularizado en los últimos años. También conocido como personal training, esta disciplina consiste en trabajar con u instructor especializado de manera individual. Gracias a ello, el socio recibe una atención exclusiva por parte del monitor, asegurándose de que está entrenando de manera específica para maximizar sus resultados y alcanzar sus objetivos. Una modalidad de entrenamiento que ya no sólo está al alcance de las celebridades y de las personas ricas, sino que muchas personas pueden pagarlo.

Un estudio de entrenamiento personal es un centro donde se trabaja con los socios tanto en grupos reducidos como de forma individualizada, con el objetivo de que mejores su rendimiento, su forma física y su salud. La principal diferencia con respecto a los centros deportivos tradicionales es que en los gym boutique el trato es más personalizado y, por lo general, se ayuda a los socios a alcanzar sus manera de una forma más rápida y segura.

¿Qué hace falta para montar un estudio de entrenamiento personal?

A la hora de montar un estudio de entrenamiento personal, es importante tener en cuenta varios factores, desde la ubicación del local a la licencia de apertura y normativa, pasando por las instalaciones, la distribución de espacios y las actividades que se ofrecerán. A continuación te explicamos cuáles son los parámetros que debes abordar desde el principio y que te ayudarán a poner en marcha tu gimnasio boutique especializado en entrenamiento personal y tener más posibilidades de éxito.

Ubicación

Según un estudio llevado a cabo recientemente por la multinacional Life Fitness, “Zoom Mercado 2018”, 7 de cada 10 socios de centros deportivos dan mucha importancia a la proximidad a la hora de elegir un gimnasio para ir a entrenar. Un factor que tiene todavía más peso a la hora de abrir un estudio de entrenamiento personal.

Por esta razón, es clave que elijamos un local en una zona que cuenta con bastante volumen de población y que analicemos el perfil de personas que viven en ella. Por ejemplo, la media de edad, el nivel de ingresos, la competencia, el porcentaje de personas que hacen deporte, el precio del metro cuadrado y la facilidad de aparcamiento, entre otros.

Diseño

El gimnasio boutique tiene muy en cuenta el diseño en sus instalaciones, cuidando hasta el más mínimo detalle. Por eso, si vas a montar un estudio de entrenamiento personal, es fundamental que el diseño y la ambientación resulten atractivos para que tus socios disfruten más de sus entrenamientos y tengan una experiencia más positiva.

Lo ideal es apostar por espacios amplios, una buena iluminación, ventilación y climatización. Y no sólo se aplica a las zonas de entrenamiento, sino también a los vestuarios, que deben ser espaciosos y estar siempre cuidados para transmitir una imagen de higiene y salubridad.

Obviamente las medidas del local dependerán del tipo de servicios que vayamos a ofrecer. Y es que no es lo mismo realizar sesiones de entrenamiento personal individuales que en grupo, o realizar varios entrenamientos individuales al mismo tiempo.

Actividades

Los gimnasios boutique, modelo dentro del que se encuadran los estudios de entrenamiento personal se especializan en una actividad o en dos como mucho. De hecho, una de las fortalezas de este tipo de negocios es precisamente su alto nivel de especialización, que los hace diferenciarse de sus competidores.

Obviamente, ya tienes claro que la principal actividad de tu club será el entrenamiento personalizado, pero es importante que dediques un tiempo a pensar si los entrenamientos serán grupales o individuales, si incluirás algún otro servicio complementario y qué precios van a tener, por ejemplo.

Para poder determinar este tipo de cuestiones, deberás valorar cuál es el perfil de público al que vas a dirigirte, lo que dependerá mucho de la localización del club.    No tiene ningún sentido ofrecer un servicio superexclusivo a un precio muy alto en un barrio donde el nivel medio de ingresos es bajo. Del mismo modo, tampoco lo tiene montar un estudio low cost en una zona donde los sueldos son elevados. Y es que los servicios que se ofrecen deben encajar con el público que nos rodea.

Formación

La formación es uno de los puntos más importantes a la hora de abrir un estudio de entrenamiento personal. Por eso, es importante que te formes en la profesión para llegar a ser uno de los mejores y destacar por encima de tus competidores. Si no sabes nada sobre esta disciplina, es mejor que elijas otra. Y es que el modelo de los gimnasios boutique requiere de una alta cualificación y de una gran pasión por lo que impartimos que debe ser transmitida a los socios. Debes tener en cuenta que este modelo de negocio se basa en la especialización y si no eres capaz de ofrecer un buen servicio en la única actividad que ofreces en tu centro, estarás abocado al fracaso.

Y no sólo debes estar bien formado desde el principio, sino que además, deberás realizar una constante labor de innovación para estar al día de las últimas tendencias del sector. Si tienes empleados, es fundamental que también los mantengas formados para que puedan brindar a los clientes el mejor servicio posible. Hoy en día, hay mucha competencia y si tú o tu personal se queda obsoleto, tus socios no tardarán en marcharse a otros clubs con entrenadores más preparados.

Equipamiento

En la mayor parte de los casos, lo que se ofrece en este tipo de estudios es el conocimiento propio de los instructores, siendo el equipamiento una herramienta más que se usa para conseguir los objetivos. Lo que no quiere decir que no tengamos que la calidad del equipamiento no importe. No podemos poner en nuestro club materiales que los socios puedan encontrar fácilmente en cualquier tienda de deportes si queremos transmitir una imagen de profesionalidad.

Es mejor empezar con poco equipamiento pero de calidad e ir ampliando de manera progresiva según nuestro negocio vaya creciendo. En la actualidad, podemos encontrar una amplia variedad de marcas en el mercado que ofrecen excelentes materiales a precios muy asequibles y que están innovando constantemente para acercar las tendencias del fitness a los estudios y gimnasios boutique.

Por supuesto, si tu estudio de entrenamiento dispone de máquinas de gimnasio, es fundamental que las revises regularmente para evitar averías. Si las máquinas se estropean, tus clientes no podrán hacer correctamente sus rutinas de ejercicios.

Seguimiento de los socios

Para gestionar la relación con los socios, es importante contar con un software que nos permita llevar a cabo una óptima gestión administrativa y un seguimiento de la evolución de los mismos para usar estos datos a la hora de planificar nuestras estrategias de marketing. Por ejemplo, eManaGym es un magnífico programa que permite satisfacer estas necesidades y que está especialmente pensado para gimnasios boutique y estudios.

Inversión

Para cualquier negocio es necesario invertir. Así que si no tienes nada ahorrado, tendrás que solicitar un crédito. Lo primero que te estarás preguntando es «¿Cuánto cuesta montar un estudio de entrenamiento personal?». Obviamente, depende mucho del tamaño del local, de la renta que tengas que pagar, de las obras que tengas que llevar a cabo para acondicionar el local y del tipo de materiales que uses.

Para que te hagas una idea, la mayor parte de los negocios de este tipo normalmente no necesitan de una inversión superior a los 100.000 euros, pudiendo ser mucho menor si elegimos un buen local que ya esté acondicionado para el desarrollo de la actividad. Además, gracias a “El Método Capitán PT: Cómo Vivir del Entrenamiento Personal”, el coste de montar un estudio de entrenamiento personal puede reducirse en un 40%. Así pues, si trabajas de forma pertinente y se dan las circunstancias adecuadas, puedes tener tu negocio funcionando por unos 25.000 euros aproximadamente.

Por lo general, la mayoría de las personas que deciden montar un estudio de entrenamiento personal, deben recurrir a la financiación para hacer realidad su proyecto. Aunque lo ideal es que cuentes al menos con un 25% del total del dinero que vas a necesitar, ya que contar con este porcentaje y estar dispuesto a invertirlo en tu proyecto, hará que sea más fácil conseguir el resto, haciendo que sea más fácil convencer a inversores particulares, bancos o administraciones. No es necesario que ese 25% sea dinero, sino que puede ser un local, un vehículo, maquinaria de entrenamiento o equipos informáticos que ya tengas.

La vía de financiación a la que suelen recurrir la mayoría de emprendedores son los créditos bancarios. Es habitual que los bancos cuenten con líneas específicas para autónomos. Para informarte al respecto, haz una visita a tu banco y que te cuenten en qué consisten con todo detalle y los requisitos necesarios para solicitarlas.

No obstante, también hay ayudas y subvenciones  del Estado pensados para empleados que se den de alta como autónomos, además de bonificaciones para los primeros años de autónomo y para la contratación de trabajadores. Y algunas comunidades autónomas ofrecen programas enfocados a la creación de empresas innovadoras, financiando entre un 15% y un 50% de la inversión a realizar.